Almacenaje

lunes, 22 de febrero de 2016

¡Buenos días, y bienvenidos un lunes más a (im)possible things!

Imagen del Estudio de Marcy Penner. No hay mejor ejemplo de que cada cosa tiene su lugar.
Como imaginaréis por el título del post, hoy quiero hablaros un poco de sistemas de almacenaje. Últimamente cada vez más personas (entre las que me incluyo) están empezando a llevar una vida más ordenada siguiendo diversos métodos, organizando su día a día, su vestuario, su hogar... algunos intentando estructurar mejor su tiempo, otros simplemente porque con el paso de los años se van acumulando cosas y llega un punto en que no sabemos dónde ponerlas.

En mi caso, tengo que reconocer que he sido una maniática del orden desde siempre, aunque últimamente me doy cuenta de ello mucho más. Tengo más tiempo libre del que tenía hace unos años, y aunque sólo tengo un cuarto para mantener organizado, cada dos o tres meses encuentro un aspecto del mismo que tengo que ordenar (mi pobre armario se está volviendo loco con tanto ajetreo).

¿Os imagináis tener algo como esto?
¡Que envidia!
Poco a poco, estoy intentando encontrar un lugar para cada una de mis cosas, especialmente para mis útiles de costura. Como os pasará a muchos, de alguna manera he ido acumulando ovillos, amigurumis a medio terminar, muestras de puntos, proyectos empezados, retales, botones, cintas y un largo etcétera de cosas que parecen no encontrar nunca un lugar en que quedarse.

Buscando por internet se pueden encontrar mil ideas para organizar útiles de costura, desde los clásicos costureros hasta maravillas como éste armario, que me hacen envidiar profundamente a la gente que es capaz de organizar espacios tan pequeños de una forma tan ordenada y práctica. Hacer algo así está en mi lista de los proyectos soñados para el futuro desde hace años, pero ando un poco escasa del espacio necesario para ello.

Por eso, de momento, uno de los métodos de organización que más me gustan son las cajas. Puedes tenerlas a la vista, guardadas en un armario o apiladas, las cosas no cogen polvo y además puedes escoger el tamaño que necesites para lo que vaya a ir dentro.

Sin embargo, la caja perfecta no siempre es la más bonita. Muchas de mis cosas están en cajas de zapatos, estuches de perfume, latas de galletas o botes de cristal. Algunas otras están en cajas más estéticas, que me han regalado o he ido comprando cuando las necesitaba, pero la verdad es que no hace falta gastarse el dinero en cajas bonitas cuando podemos darle un lavado de cara a las que ya tenemos.

¿Cómo? Aquí van algunos de los tutoriales que más me gustan para personalizar sistemas de almacenaje. ¡Espero que os resulten útiles!

Nueva vida para tus latas

Para los que os guste guardar las latas de galletas y estáis cansados de que las vuestras tengan aún los nombres de las marcas o feos dibujos, ésta idea de Miprimera máquina de coser os gustará. Con sólo un par de sprays de pintura y un rato libre, podéis personalizar vuestras latas con los colores que más os gusten, y si os gusta el sistema, podéis probar a mezclar colores o hacer otros diseños. Sencillo y barato, ¿qué más se puede pedir?


Bordar cajas de cartón

Si sois, como yo, unas (o unos) apasionadas de la costura, ésta idea de Cosas molonas os encantará. Es un proyecto algo más laborioso, porque hay que encontrar un patrón que nos guste, adaptarlo al espacio, hacer los agujeros y coserlo, pero la verdad es que viendo el resultado, merece la pena el esfuerzo.

Tampoco os preocupéis si no sabéis punto de cruz: los esquemas son sencillos y sólo hay que seguir los colores, no importa si el trasero queda un poco desordenado, no va a verse.

Además, ésta idea se puede adaptar a otras muchas cosas: yo decidí utilizar el mismo patrón que proponían en el tutorial para personalizar una tarjeta-regalo: doblé una cartulina por la mitad, bordé la flor en una cara y dentro escribí la felicitación y puse el regalo.

Empapelar cajas de madera

Para todos los amantes de las cajas de madera, este tutorial de Hecho por kit me ha parecido precioso, la única cosa que cambiaría sería la elección de las cajas. Tan sólo se necesita cola blanca, agua y unas hojas de un papel que os guste para hacer la transformación.

Y si os gusta cómo queda la madera por fuera, siempre podéis aplicar ésta técnica en el interior de la caja o sólo en uno de los lados para darle un aire diferente sin que pierda personalidad.

Y vosotros, ¿sois de los que acumuláis cajas para guardarlo todo?
¿Las habéis personalizado de alguna manera?

2 comentarios:

  1. Acumulo cajas bonitas aunque nunca he personalizado ninguna. La idea de bordar sobre cartón me parece tan chula que no me resisto a dejarla pasar, tengo que probarlo. :-)
    Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¡Hola! Yo pensé lo mismo, la verdad es que es una idea que deja un resultado precioso. Yo tengo un par de cajas muy sencillas que están esperando a que encuentre algún patrón bonito para bordarles ^^
      Saludos!

      Eliminar